Conocida por los veteranos pescadores locales como port de Benirrás por su estructura de bahía cerrada, protegida de los fuertes vientos, está situada en un paraje natural de singular belleza y cuenta con un frondoso bosque por el que serpentean senderos que harán las delicias de los aficionados a esta disciplina. Una amplia oferta gastronómica y la presencia del cercano islote de Cap Bernat hacen de este un lugar realmente especial.